Lofoten nos trató demasiado bien. Nos recibió ¡con más de 25 grados! Y te voy a recordar dónde se ubica: estas islas noruegas se encuentran ¡por encima del Círculo Polar Ártico! No podíamos creernos la suerte que estábamos teniendo (aunque luego fue
Amo Noruega. Ya está, ya lo he dicho. Si no fuera por la ausencia de luz en invierno, la inexistente calidad gastronómica y, por supuesto, por su nivelón de vida (imposible de mantener a menos que tengas un sueldazo noruego), me iría